Introducir un gato nuevo en casa. Fase I: intercambio de olores.
Hoy vamos a contaros cuáles son los pasos para introducir un gato nuevo en casa cuando ya tenemos un gato.
En relación con introducir un gato nuevo en casa en la que ya hay otro gato, aunque sea cariñoso, hay que tomar una serie de medidas para evitar conflictos y agresividad entre gatos
1) Acondicionar una habitación para el nuevo gato con los recursos fundamentales (agua, comida, bandeja, rascador, juguetes, sitios de descanso y escondites). Dos o tres días antes de su llegada puede ponerse Feliway (feromonas faciales felinas) difusor en esa habitación para aumentar la sensación de familiaridad y seguridad, facilitando su adaptación.
2) Darle tiempo para que se encuentre seguro en esa habitación y se acostumbre a todos los miembros de la nueva casa. Cuando esto ocurra, el gato debería estar comiendo, descansando y relacionándose de manera normal.
3) Proporcionar recursos adicionales al gato que ya vivía en esa casa, así como otro difusor Feliway en la zona de mayor presencia del gato antiguo.
4) Observar la reacción del gato antiguo al dejar que explore el transportín en el que llega el nuevo gatete (sin tener contacto con él, solo el transportín vacío).
A partir de aquí para introducir un gato nuevo en casa debe hacerse gradualmente en varias fases. El tiempo necesario para pasar a las fases siguientes suele ser corto en estos casos (varios días en la mayoría de los casos), salvo que en algún momento del proceso bien los gatos residentes, bien el gato nuevo, muestren signos de miedo, ansiedad y/o agresividad, en cuyo caso será necesario prolongar los tiempos de cada fase:
FASE I: Intercambio de olores.
En esta fase, manteniendo a los gatos separados todo el tiempo sin que puedan verse, se realizan dos ejercicios:
I. Con un par de trapos diferentes (también funcionan bien un par de calcetines viejos) se frotan la zona alrededor de la boca y de las mejillas de cada uno de los gatos. Estos trapos con el olor de cada uno de ellos se muestran al otro gato para que puedan olerlos. Funciona muy bien dar un premio muy atractivo para el gato una vez que lo ha olido unos instantes. No se les debe forzar a olerlo.
- Si se observan signos de rechazo (alejamiento, bufidos, etc.) habrá que avanzar más gradualmente, alejando el trapo.
- Una vez que los animales aceptan los olores del otro sin problemas, hay que llegar a frotarles en las zonas comentadas anteriormente, a cada uno con el trapo del otro, para intercambiar los olores.
II. Intercambiar a los gatos, dejando que cada uno vaya a la zona del otro (sin que puedan verse o encontrarse), para que el intercambio de olores sea mayor. Estos intercambios pueden hacerse cada 8, 12 o 24 horas.
- Si uno de los gatos no tolera adecuadamente estar separado de los propietarios para dormir, porque vocaliza, por ejemplo, pueden hacerse a lo largo del día, manteniendo a ese gato por las noches siempre con los dueños.
- También pueden intercambiarse las camas o mantas donde descansan los gatos.
Una vez se haya completado la fase I, tendrás que ir a la fase II. Pincha aquí para descubrir cuál es.
Si acabas de incorporar a un gatete a tu vida, estos planes de salud para gatos y gatos cachorros te interesarán!